Elegí la novela por el título, para qué negarlo. "Lo que el alcohol ha unido que no lo separe la resaca", de García de Saura, me parecía divertido y diferente. Supuse que me encontraría con una novela entretenida y con la que podría reírme un rato. Nada más lejos. Me ha costado mucho leerla, la he tenido que ir mezclando con otras para poder acabarla.
Lucía es una joven que, a punto de casarse, descubre que su prometido le es infiel y lo deja plantado en el altar (cómo lo hace es lo único original que hay en la novela). Después de esto decide salir de fiesta con sus amigas y acaba siendo una noche memorable (supuestamente con situaciones desternillantes). Ahí conocen a unos guardias civiles y uno de ellos, el teniente Urbano, será el que haga que Lucía crea en las segundas oportunidades.
A lo largo de la novela me da la sensación de que cuando la autora no sabe cómo sacar a los protagonistas de una situación, acaba el capítulo y empieza uno nuevo con todo ya arreglado. Así que hay situaciones que no entiendo cómo llegan a solucionarse, o diálogos que no sé por dónde cogerlos.
Ademas, como ya he comentado en reseñas anteriores, un diálogo con "jajajaja" me saca totalmente del momento. De verdad, si la escena es divertida, nos reiremos. En este caso no he esbozado ni una sonrisa en todo el libro. Tampoco he podido soportar los diálogos de la hermana de la protagonista. Realmente muchas partes me las he ido saltando porque no podía con tanta tontería.
Y la parte erótica... no me ha hecho sentir nada.
Una cuestión que toca, y que creo que es de lo poco que me ha parecido interesante, es: ¿le contarías a tu mejor amiga que has visto cómo su marido le era infiel?. Es una de esas situaciones realmente delicadas en las que hay que tener tacto y confianza. Pase lo que pase, las amigas de verdad siempre están ahí para apoyar, ayudar y si hace falta matar.
Os dejo el booktrailer:
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